bianca neve scende senza vento.
Y llegó secreto con su fulgor
convertido en monedas de oro que cayeron
sobre mí, y alrededor, y en el suelo.
Se dijo a sí mismo una voz y aquel oro de ceca
se arremolinó en un amén y se hizo el varón.
Me encontró virgen, me aró y me sembró.
Me bebió, como quien se echa con sed sobre un río.
Pero lo pasado, pasado.
Ahora soy vieja, y en un reino de columnas derribadas
voy y vengo por entre los cipreses y las palomas.
Me tienen por loca y creen que miento
cuando digo que fui desvirgada por Zeus.
Para burlarse de mí golpean una moneda en el mármol
y yo creo que él vuelve, y me quito la ropa
y me dejo caer desnuda en la hierba come
bianca neve scende senza vento.
Ni escucho sus risas. Ya soy vieja
pero nunca pude salir de aquel sueño de antaño "
Álvaro Cunqueiro ( 1911-1981 )
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